Confites en los infiernos

Hoy me fui a un almuerzo de esos que llaman ejecutivos, era una reunión entre tres tristes tigres y yo, mientras ellos hablaban de sus deficiencias sexuales originadas por su edad y piropeaban a la salonera mientras ella se vomitaba mentalmente, yo pensaba en cómo putas salir de ahí, y si me levanto y me voy como ya lo he hecho antes, y mando todo a la mierda y quedo como el loco mas loco del mundo. Pero y si más bien me pido el plato más caro de todos para cagarmeles, o si no me pongo a volar en la mente y pensar que todo era parte de una pesadilla o de una joda de Tinelli. Al final me decidí por volar y por pedir el plato más caro.

El restaurante era de esos a los que yo no hubiera entrado ni por error, un restaurante donde se junta la gente rica a comer y a conversar de temas en los que yo no tengo ningún interés, se habla de política de ´´viste esta bien endeudado fulano´´....´´viste la esposa de tal lo dejó´´...´´mira este vídeo de esta mujer chinga´´ es decir de lo mismo que habla la gente de barrio solo que en lugar de caldosas comen según ellos bien, yo creo que hasta a ellos mismos les sabe feo pero el status los hace que se obliguen a comerse la mierda que comen.

Les decía que el restaurante era de ricos, un papel metido dentro de otro papel, con una botella de agua, y el agua es para el primer papel que empapa el otro papel y este sirve para limpiarse las manos, manos que por más que se limpien siempre estarán sucias. La conversación una vulgaridad por donde se mire, que lindo es estar donde uno se siente bien, donde uno quiere estar y que feo es obligarse a hacer algo que uno no quiere, mas cuando uno es como es, intolerante y asqueroso.

Al final los temas centrales de la reunión se fueron diluyendo para dar paso a la mas corriente de las conversaciones, lo que me hace pensar que la clase no es algo que se adquiera con el dinero. Pero y el plato? La comida? pues la peor que me he comido, un puré de camote de paquete, una carne que ni en zapote me he comido una peor, una especie de adorno navideño con vainicas y semillas, por amor a Cristo.... y una limonada con hierba buena que mas bien diría que era un licuado de culantro o perejil, una verdadera pifia culinaria, y luego dicen que el Karma no existe, claro que existe ahí estaba, yo quería una hamburguesa de salmón pero preferí joder el bolsillo de uno de esos tipos.

Pero al final que queda, salir en libertad condicional este fin de semana y ir a vivir mi vida, comer carne pero carne de verdad, ver a mi familia, masturbarme como Dios manda....y hacer de cuenta que todo forma parte de una conspiración en mi contra para hacerme el día una mierda, pero adivinen, hoy tampoco pudieron y además es viernes.