Cuando vuelvan los dragones, Dracula, Jafar, Cruella
de Vil con su amiga Lady Tremaine, el
Juez Claude Frollo del brazo del Capitán Garfio, apostaran sus cabezas. Yo seleccionare mi bando, escogere a los malos entre los
malos. Mi capitán sera Drácula, mi comandante de armas Cruella (selección por
razones de equidad de género), y por último Garfio, quien a pesar de no tener un
brazo odia a Peter Pan, de tal forma que lo ocupo en mi bando.
Un imán, por supuesto ocupamos un imán. De
repente una guadaña. No, mejor un dragón, si un dragón que corte cabezas y las
vomite. A Frollo le daría la cabeza de Tremaine, la de Tremaine a Frollo y por
supuesto, Jafar, se la arrancaría y se la volvería a poner. Una espléndida manía
circular.
¡Por las tetas de Tiresias! Grito Cruella al
ver el dragón ingresar a la sala, si yo estoy con él, ¿quién contra nosotros?
Mientras nos inclinábamos sentimos un estruendo
antifonico y un jinete con su corcel de setenta y siete cabezas ingreso. Veni,
vidi, vici!!! Exclamo, mientras pensé para mí mismo, claro, lo que este no sabe
es que el amor es eterno, mientras dura.
Cruella cambio su rostro, J'aime faire l'amour
avec toi!!! Grito como una maldición. A eso no vinimos, aunque no es mal punto
de arranque, pero hoy no, replico el Jinete. Jafar río, y Cruella lo estrangulo.
Pavlov, Pavlov, Pavlov si
tan solo Pavlov estuviera aquí! Fueron las últimas palabras de Cruella
antes de ser cercenada su cabeza por el Jinete. Esta rodó, y dejo entrever una
sonrisa absurda desdibujada en Cruella.
Al ver esto, Drácula voló alto, muy alto. Sabía
que era la oportunidad de luchar contra el Jinete mano a mano, pues Tremaine y
Claude se habían convertido en espectadores. Hablaban de lo necesario de un
cambio en el mundo.
Todas estas cabezas son mentiras, pensó Drácula
al ver al Jinete en su corcel. Más empezare por la más pequeña hasta llegar a
la más grande. Pero estas volvían a aparecer. Murió de cansancio, con su cabeza
intacta.
Garfio corrió a Nunca Jamás.
El Dragón me devoro. Con todo y cabeza.
Diego Demora
Bienvenido.
ResponderEliminarNo tengo más para decir.