Si había
mil por romper,
te ensañaste
con el menos cruel
de los pocos trenes sin riel
que quedaban por
corromper.
Y hoy cargo
con sus viejas dudas
por fantasmas
que creía olvidados
en vagones
que vimos acabados
Por tus dioses
y sus budas.
Volverás,
sabremos que volverás
por si el
otro no te escucha
para iniciar
de nuevo tu lucha
de volver
al nunca jamás.
Ma la vida
no es justicia
Ni el amor
bien pagao
Vamos a
morir parao!
Ma no por ti, Dear Leticia.
Diego Demora
No hay comentarios:
Publicar un comentario